¿Puedo curar mi dolor de piernas con medias de compresión?

Las piernas pueden doler por muchas razones, algunas de ellas pueden presentarse por una jornada extenuante de trabajo, por mantenerse por varias horas en la misma postura o por usar un pantalón muy ajustado. Pero, cuando el dolor se vuelve recurrente o permanente es importante revisar alternativas con las que puedas tratarlo y prevenirlo.

Algunas de las principales causas para que un dolor de piernas se convierta en crónico e incapacitante están relacionadas con sobreesfuerzo muscular, lesiones, problemas de circulación, problemas en las venas o los nervios, condiciones médicas o, en el caso de las mujeres, embarazo. Buscar atención médica es importante si el dolor está acompañado de hinchazón excesiva, enrojecimiento o fiebre.

En caso de que el dolor se presente solo, existen diversas formas para tratarlo, una de estas es el uso de medias de compresión, que incluso pueden ayudar como medida preventiva en la aparición de éste.

 

¿Qué son las medias de compresión?

Las medias de compresión son prendas ajustadas y elásticas que se ponen en las piernas y que cada vez se vuelven más populares. Están diseñadas para ejercer presión de manera gradual en las extremidades inferiores, la compresión más fuerte se realiza en el tobillo y va disminuyendo gradualmente a medida que se acercan a la rodilla o al muslo. Esta compresión gradual ayuda a tener un mejor flujo sanguíneo, así como a reducir la hinchazón y a dar soporte adicional a músculos y articulaciones. 

Algunos de los beneficios más destacados de las medias de compresión están relacionados con mejorar la circulación sanguínea, al generar presión ayudan a reducir la acumulación de líquidos en las extremidades favoreciendo al flujo de sangre. Esta cualidad las hace atractivas para deportistas de medio y alto rendimiento. Su uso durante la actividad física, disminuye el dolor y la fatiga muscular, mejora el rendimiento deportivo al facilitar un mayor flujo de oxígeno hacia las piernas, ayuda a prevenir la aparición de lesiones por desgarro o sobreesfuerzo y son un gran aliado en la recuperación del tono muscular.

Es importante establecer que las medias de compresión no son iguales a las medias varices, pues, aunque las dos se empleen para mejorar la circulación y reducir la hinchazón, cada una tiene particularidades que las hace específicas en su uso. La principal diferencia es que las medias varices están diseñadas específicamente para prevenir y tratar las venas varicosas y las medias de compresión se usan para mejorar la circulación, reducir la hinchazón y prevenir la formación de coágulos de sangre. Por otra parte, el nivel de compresión de las medias varices es mayor que el de las medias de compresión. Y, finalmente, las medias varices están diseñadas para ser usadas durante todo el día, mientras que las medias de compresión solo por periodos cortos de tiempo. 

Teniendo claridad entre estos dos tipos de medias, las medias de compresión son una excelente herramienta para aquellos que buscan mejorar su rendimiento deportivo, prevenir lesiones, disminuir la hinchazón, mejorar su circulación sanguínea y acelerar la recuperación muscular. Si estás interesado en utilizar medias de compresión, asegúrate de elegir una talla que se ajuste correctamente. Comunícate con nosotros a través del chat o déjanos tus datos en el cuadro que encontrarás al final del blog, nuestros asesores se comunicarán contigo para brindarte toda la información y acompañamiento para adquirir las tuyas. 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *